"Semifinal y estar en los 49"

Gabriel Melconian es uno de los pocos uruguayos con un lugar en Londres 2012 casi asegurado, junto con Andrés Silva (marca A en atletismo) y el fútbol. Y hoy hará su debut en los Juegos Panamericanos de Guadalajara en la prueba que lo metió en los Juegos Olímpicos: los 100 libre.

El uruguayo, nadador de Biguá, llega con 50.20. "Mi objetivo es estar en los 49", comentó Gabriel en una entrevista con Uruguay olímpico. El récord nacional es de Martín Kutscher, con 49.70. Como meta está meterse en semifinales de la prueba. "Es realizable", aseguró. En cambio, es consciente que la final es casi imposible: "Tenés seis lugares seguros con Brasil, Canadá y Estados Unidos, más Venezuela, más alguna sorpresa". Y son sólo ocho.

Ya en la Villa, Melconian grande no fue a la ceremonia inaugural porque prefirió descansar. Según supo Uruguay olímpico, todos han podido descansar bien y la altura no los ha afectado tanto. Allí tienen todos los recursos como fisioterapuetas, médicos, masajistas. Tuvieron un muy buen recibimiento y la gente es muy amable con él y el resto de los nadadores uruguayos.

Gabriel, de 24 años, no es el único Melconian en Guadalajara: su hermano Martín, el menor, también compite hoy en los 100 pecho. Ambos, también hoy, compiten en la 4x100 libre.

--¿Cómo se llevan?
--Bien, bárbaro. No hay rivalidad. En la última Copa Banco, nadamos la misma prueba (100 pecho) y lo agitaba con que le iba a ganar, al final me ganó pero sólo por seis centésimas. Pero nos alentamos mutuamente...

Su comienzo en la natación fue de bien pequeño: "Empecé a los dos años. Hasta que llegué a Biguá a los 13, ya con mi hermano. Al principio me iba mal, la tuve que remar más", recordó. Y fue recién en febrero del 2006 cuando pegó el salto: "Salí primero en los 50 y 100 del Federal de menores en Mar del Plata, Argentina, y empecé a figurar". Ahí le ofrecieron ir a representar a River, lo que le permitió ganar un sueldo con el que pagaba la Universidad.

"Fue una linda época. Estaba en el mismo equipo que José Meolans, más Eduardo Otero, Walter Arciprete, Agustín Fiorilli. Era un equipazo, Ganábamos casi todo. Para mí, era un orgulloso nadar con esas bestias", aseguró.

Los años pasaron y luego de ir a Río 2007, Gabriel no pudo clasificar a Beijing 2008. Para peor, en la última chance de clasificación se quebró la mano. Una larga recuperación, más alguna burocracia en su vuelta y la idea de dedicarse a full con el estudio, hicieron que el mayor de los Melconian dejara de entrenar. "Sólo competía por el club. Luego conseguí laburo y acá no conseguía ni una beca y eso fue peor".

Hace unos meses decidió volver y enseguida logró la marca que lo clasificó a Londres (tiene marca invitacional, que le pueden sacar si algún otro uruguayo hace también la marca, aunque como es un sistema nuevo la letra chica indica que casi todo puede pasar), al Mundial de Shanghai y a estos Juegos Panamericanos.

Regresó con todo. Y está listo para tirarse al agua.